Rollitos de pechuga con espinacas

Rollitos de pechuga de pollo con espinacas

A continuación te traemos una de las recetas mas populares y que nunca puede faltar en tu cuaderno de recetas, así es el clásico pollo con espinacas pero esta vez enrollado para que le des variedad a tus comidas y sorprendas a tus comensales.

Ingredientes para porción de 6 personas

. 2 pechugas de pollo grandes (550 g)

. 200 g de espinacas frescas

. 4 ajos

. 6 lonchas de queso

. Sal

. Aceite de oliva

. Huevo

. Pan rallado

Preparación

1.- En una sartén con un poco aceite de oliva virgen extra, rehoga las espinacas crudas junto con los ajos bien picados. Cuando hayan reducido su volumen y sin dejar que se sequen demasiado retíralas del fuego. No añadas sal en este punto porque las espinacas en crudo abultan mucho y corres el riego de sazonar con demasiada sal.

2.- Limpia la pechuga bien y si tiene solomillo retíralo (es pequeño para rellenarlo y mejor sólo lo rebozas). Córtalos en filetes finos. Hacer un filete y, sin terminar de cortar, cortas el siguiente hasta el final de manera que te queden filetes grandes. Por cada pechuga conseguirás tres filetes. Si lo haces con pechugas más pequeñas, posiblemente te salgan uno o dos. Si alguno se te parte, no te preocupes, que luego al rellenar lo arreglas.

3.- Coloca un film de cocina sobre la superficie de trabajo. Sitúa encima el filete de pechuga abierto. Colca encima una loncha de queso, sin sobrepasar el borde de la pechuga, encima del queso, extiende una fina capa de espinacas y sazona con la sal al gusto.

4.- Enrolla desde el pico de la pechuga al final. Luego envuelve el rollito con envoplast y cierra las puntas. El relleno debe quedar completamente cubierto por la pechuga de pollo, una vez tengas los rollitos preparados, guárdalos en tu frigorífico al menos una hora lo que es recomendado pero también puedes dejarlos en el congelador durante cinco o diez minutos.

5.- Retira el envoplast transparente con cuidado de no desenrollar las pechugas y sazona con un poco de sal.

6.- Pasa un rollito de pechuga de pollo por el pan rallado, insistiendo en el borde y después pásalo ahora por huevo cuidando de que los bordes queden bien impregnados y reboza de nuevo con el pan rallado. Si por el borde ves que queda abierto, moja esa zona en el huevo y luego tapa con pan rallado. Te aseguro que lo puedes sellar perfectamente. Una vez rebozados todos, ya sólo quedará freír.

7.- Coloca abundante aceite de oliva virgen extra en un sartén y fríe los rollitos hasta que tengan un bonito color dorado. Lo mejor es hacerlo a fuego medio para que el calor penetre hasta el interior y la pechuga se cocine por completo, al tiempo que el queso se funde. Una vez fritos, déjalos en un plato sobre papel de cocina absorbente para quitar el exceso de aceite.

Sirve los rollitos de pechuga de pollo con espinacas bien calentitos y así disfrutarás de un rebozado muy crujiente, una pechuga jugosa y un delicioso queso fundido. Seguro que triunfas!

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